lunes, 18 de junio de 2012

La moda de jugar en círculos

Hoy de tarde tuve estas 3 frustraciones:
1- Ver todo el partido esperando encontrarme con la super selección de España, con sus goles y su magnitud futbolística que los entendidos asemejan con el Barcelona, y  que nunca apareciera.

2- Estar tan cerca de la posibilidad de ver a esa selección blanda y lavada quedar afuera de la copa, y que por la mala puntería de los delanteros croatas no se diera.

3- Estar a 2 minutos de ganar unos pesos en el supermatch, y ver a la defensa croata derrumbarse junto y justo en el momento que se necesitaba mayor solidez.

Ver al equipo español, que hace alarde de su condición de candidato por ser el último campeón del mundo y último campeón de la eurocopa fue de las cosas menos gratificantes y placenteras que vi en la última semana en materia futbolística.
Hay una cosa que hay que decir sin miedo: España es una gran mentira.
Su fútbol es tan aburrido como el del Barcelona, con la diferencia y la desgracia de carecer de un jugador como Messi, que en los últimos metros con sus gambetas y sus piques furibundos hacen que esa máquina insípida de la ciudad catalana, funcione a la (casi)perfección.
La selección española juega a poseer el balón, algo que es positivo si y solo si, hay intención de ataque voraz y vehemente. Tener la pelota el 70 o el 80 % del tiempo que dura el partido no sirve para nada si se juega en círculos pasándola de un lado al otro, sin tener profundidad y prácticamente sin pisar el área.
Es indudable e indiscutible la capacidad que tienen los 3 centrocampistas del Barcelona que juegan en la selección. Tanto Xavi, como Iniesta y Busquets son unos jugadores excepcionales que manejan la pelota como pocos, y que además de tener gran técnica, en general no fallan los pases.
Entonces bien, una parte está perfecta, ¿pero la otra?
Esta tarde la selección española practicamente no atacó a un equipo croata muy limitado, sin figuras estelares, con una defensa que se rompió en el momento más importante del partido, y unos delanteros que fallaron en los momentos que no se puede perdonar.
La selección croata jugó de una manera bastante conservadora, cuidando mucho la zona media y la zona defensiva del equipo, hasta que se enteró que los italianos iban ganando, y ya no les servía el empate.
En ese momento el partido se tornó un tanto más emotivo, ya que un gol croata dejaba a los españoles afuera. El equipo español tuvo a su favor un fallo muy polémico, cuando el árbitro no sancionó un penal que el burro de Sergio Ramos cometió por llegar a destiempo.
Los españoles muy nerviosos insinuaron alguna cosa, pero poco y nada, ya que los croatas estaban muy firmes.
En el segundo tiempo las cosas cambiaron un poco. El dominio español (de posesión) fue inútil, o al menos con menor utilidad, ya que los croatas cada vez que agarraban la pelota intentaban llegar rápidamente al área de Casillas con 2 o 3 toques. Y ahí apareció el mejor fútbol, y las situaciones más claras. La más obvia fue un cabezazo al borde del área chica que no terminó en gol por la poca jerarquía del jugador de Croacia.
Los españoles me alegraron un poco, porque rompieron con su esquema de toque boludo, y aprovecharon los embates del rival para jugar de contragolpe. Si señores! España, el que casi todos consideran el mejor, jugó de contragolpe contra Croacia!
Y es verdad, España tuvo (como Croacia) 3 o 4 claras para hacer el primer gol, pero su desempeño fue realmente preocupante por la dimensión del rival.
Ya casi terminado el partido, con el equipo croata jugado totalmente al ataque, esperando que se diera el milagro de dejar a la gran potencia afuera de la copa, fue como llegó el gol del equipo español, un lindo gol, que puso paños fríos a la situación de la selección, aunque la cara larga de Del Bosque, y la realidad demuestran que esta selección si sigue jugando de esta forma, y si los rivales se animan a jugarle como lo que es (una selección del montón), los españoles se vuelven en un par de días a su país.


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