Sequía

Estamos con un pie afuera pero estoy tranquilo. No me parece trágica la derrota, ni creo que Uruguay haya jugado peor de lo esperado. La derrota y el momento futbolístico hay que analizarlas tomando en cuenta varias cosas. Tiro algunas.

1-      En la nota anterior sobre el partido contra Emiratos Árabes dije que seguramente Suárez no iba a jugar tan mal en toda su vida con la selección. Me equivoqué. Lo peor que este mal momento parece haber contagiado a Cavani. En definitiva, si se llega al arco, incluso zafando de una defensa numerosa, y se erran los goles, es muy difícil seguir en una competición como esta.

2-      Dejen de joder con el futbol africano, su crecimiento, su evolución. Ayer Senegal jugó como el Fénix de Rosario Martínez. Hizo dos goles de corner y después se metieron todos atrás a pegarle a todo lo que tuviera algo celeste. Nunca digo que una derrota es injusta, y nunca lo voy a decir. Pero si estuve cerca de pensarlo, fue ayer.

3-      Tenía mucha confianza en Calzada, pero no anduvo bien hasta ahora. Quizás habría que probar un cambio. Torito Rodríguez podría ser, si eso no hiciera que Uruguay se volviera más tosco con la guinda.

4-      La defensa no para a nadie, estamos de acuerdo. Pero ayer los goles fueron culpa de más jugadores que los del fondo, no hay que demonizar. Además vuelvo a repetir, si los delanteros hacían el 2% de las chances que tuvieron, el partido se ganaba fácil.

5-      No veo firme a Campaña. Veo hoy que todos los medios lo ponen como uno de los mejores. Yo no lo veo bien, pone nerviosa a la defensa, juega muy debajo de los palos y creo que en el segundo gol su respuesta fue muy mala. Claro, en el banco está Gelpi que es mucho peor, así que esperemos que Campaña  mejore.

6-      Arias mejoró pero sigue estando fuera de mi once titular.

7-      Me calientan los periodistas panqueques que dicen que en realidad no esperaban  nada de esta selección. Oportunistas y cagones, todos vinieron a ver a Uruguay campeón y ahora abandonan el barco, ratas.

8-      También me calientan los periodistas alcahuetes. El proceso que se está haciendo por parte de este cuerpo técnico en todas las categorías, no se va a empañar o a estancar porque digan que algo está mal cuando efectivamente lo está. No se defiende un modelo acariciándole la espalda y diciéndole que todo está bien.

9-      Por último, Gran Bretaña no me asusta. Son horribles y garcas. Además va a ser el mejor partido de Suárez.

otra vez arroz

Es muy difícil hablar de las selecciones uruguayas sin repetirse. Los debuts en los torneos terminan siendo un bodrio, que no cumplen ni con la mitad de las expectativas que la gente genera. El ciclo de Tabárez se ha caracterizado por un puñado de cosas que a la larga han dado algunos buenos resultados. La línea de 3 por ejemplo, dio resultado seriamente solo en el partido contra Paraguay, en las últimas eliminatorias, en el estadio Centenario. La circunstancias de ese partido llevaron a que Tabárez hiciera una corrección en su planteo táctico a pocos minutos de empezado el partido, que a la postre le dio buenos resultados, y ese partido Uruguay lo terminó ganando bien. Esa fue la única vez, por eso no se entiende el motivo de la línea de 3 en el partido contra los árabes. Y mucho menos si en los partidos de preparación apenas fue usada en algunos minutos. Esta selección uruguaya no tiene zagueros que se adapten a este esquema, ya que para usarlo se necesitan jugadores rápidos, que sepan anticipar y salir rápido, además sabiendo pasar la pelota. Ni Coates ni Rolín saben pasar la pelota adecuadamente, ni son tan rápidos como para anticipar a los delanteros. El caso Arias merece un párrafo aparte. Es un jugador que tiene una capacidad innata para pasarle el balón siempre al rival. No sabe marcar, ni sube con criterio, y es un flan. En el gol de los árabes le puso una pelota en el pecho a un defensor rival, que salió jugando con el tipo más talentosos que tenían ellos, quien rápidamente hizo un gran pase que dejó de cara al gol al delantero Matar. En el gol se equivocó 2 veces: mal el pase y mal el cierre (el pase fue a sus espaldas). En general vi y escuché una sobrevaloración a lo realizado por el equipo rival, y no una crítica profunda a lo que pasó con nuestro equipo. No vi críticas al planteo de DT uruguayo, ni a los cambios, ni a la idea (si es que hay) que se propone para estos j.j.o.o. No se dijo que la defensa estuvo dubitativa todo el partido, ni que el medio no agarró a nadie, ni que Arévalo Ríos jugó prácticamente solo. Ni hablar de la poca generación de fútbol y de la escasa participación de los delanteros. Tuvimos suerte, uno de los factores más importantes del ciclo Tabárez. En el mejor momento de los árabes, cuando estaban para terminar de hundir a la selección uruguaya, llegó el golazo de Gastón Ramírez, que dicho sea de paso, fue casi lo único que hizo. El error de la selección petrolera fue querer hacer el 3er gol antes que el 2do. Grave error!

En el segundo tiempo la cosa cambió, a pesar de sacar a Aguirregaray (junto a Arévalo lo mejor del primer tiempo) y mantener a Arias, se jugó con línea de 4 y la cosa fue otra. Albin que estuvo perdido todo el primer tiempo se empezó a sentir más seguro. Rolín y Coates se repartieron de forma aceptable las tareas en la zaga, y el medio tuvo más aire, porque ya no le ganaban la espalda con tanta facilidad. Por supuesto fue un acierto la inclusión de Lodeiro, un tipo por el que en general nadie da dos pesos, y no es de mi simpatía futbolística, pero se mandó un gran partido, diría que el mejor desde que viste la celeste. Los delanteros siguieron jugando muy mal, cada uno con un balde de 50 lts en la cabeza. Intentando resolver solos situaciones imposibles de resolver a pesar del bajo nivel de los defensores rivales. Uruguay terminó ganando bien, pero no le sobró nada. Ganó porque supo resolver una situación que el rival no resolvió. Llegó poco pero con efectividad, sin estar ni cerca del día soñado de Suárez o Cavani, que otra vez volvió a jugar de lateral derecho, como le gusta al Maestro. Los árabes terminaron siendo una selección simpática, que cayó en la trampa de las modas futbolísticas, del toquecito intrascendente para los costados, los caracoleos de los buenos jugadores y las pisaditas para atrás a 50 mts del arco. Una selección con jugadores con lindos peinados y pieles tostadas envidiables. Uruguay, en cambio, si quiere aspirar a cosas serias debe mejorar, pero de verdad, porque si no se va a volver rápidamente silbando bajito uno de los himnos más feos del mundo.

Casarse con los errores

No me gustó cómo jugó Uruguay. Ya venía rara la cosa con la adopción de una línea tres por parte del entrenador y la inclusión de Aguirregaray por Urretaviscaya. Y si venía raro, más raro se puso cuando los árabes nos clavaron a los 20 minutos. Después vinieron 10 minutos de baile, pero no de un baile imposible de revertir (como creían en ese momento los periodistas), sino de ese que en el barrio decíamos era “estar pizarreando” (recordar el primer tiempo contra Senegal en el mundial 2002). Lo cierto es que después nos pusimos un poco las pilas y se lo dimos vuelta y los árabes dejaron de hacer pisaditas, caños y jopeaditas y terminaron desesperados jugando a dárselas todas al 15 a ver si inventaba algo.

¿Pero qué podemos decir del Uruguay? Creo, y acá varios lectores me darán con un caño, que esta selección tiene más chance de jugar bien que la mayor. Sólo depende  de que el técnico arme bien el equipo y trabaje mejor, ya que es incuestionable que si de un lado juega Eguren, Palito o Abreu, y del otro Ramirez, Lodeiro y Calzada la balanza se inclina claramente. Pero el tema es que Tabárez arma mal el equipo, y esa suerte que lo acompaña cuando arma el equipo y aun así gana, se puede terminar.

Tres en el fondo, mal. Puso por una punta a Coates que es súper lento, y en la otra a Arias, quien ya no justifica por ningún lado su inclusión en el equipo. Sacó a Aguirregaray en el entretiempo cuando había sido de lo mejorcito. Antes ya había sacado a Urretaviscaya, quien es mucho más carrilero que Albín o el vasquito, a quienes manda al muere con esa tarea. Vuelve a poner a Cavani de volante y deja a Suárez en la cancha cuando estaba visiblemente cruzado y cansado pudiendo poner a la Joya Hernández. Todos amamos a los tres mayores que eligió Tabárez, pero como técnico, debe dar el mensaje saludable de que llegado el momento si tiene que sacar a alguno de los tres lo va a hacer.

También ligó mal, Suarez jugo su peor partido en la selección, Albín anduvo bajo, Calzada metió un segundo tiempo horrendo, Ramírez tuvo un partido lleno de lagunas y Cavani no embocó una. Además de todo eso, ellos metieron un primer tiempo muy bueno. Pero si a la mala liga la ayudás con cagadas evitables, la cosa es peor aún.

Uruguay va a mejorar, Arias debe salir del equipo, se debe volver a la línea de cuatro y a jugar con carrileros (como Urretaviscaya). Hay gente que pide a Lodeiro y yo creo que aunque hoy jugó bien, no debería ser titular ante Senegal. Ahora se viene lo lindo y es lo que más le gusta a Uruguay. La cosa puede mejorar, sólo hay que animarse a cambiar lo que está mal y no casarse con jugadores.

Nos espera Senegal, vamos a ver qué pasa. Por lo pronto en el grupo, ojalá Gran Bretaña pierda todos los partidos.