sábado, 21 de junio de 2014

Los hinchas de Uruguay

En estos días he leído muchas cosas extrañas y hasta complicadas de digerir.
Un sector, defensor y militante del "proceso Tabárez" sostiene que los dueños de este festejo son solo aquellos que apoyaron desde el primer minuto esta era, que los que no lo hacemos somo unos anti-patria que tenemos que cerrar la boca, y es un gran error. La selección es patrimonio de todos o de ninguno.

Yo quiero que la selección gane siempre, y si se puede jugando bien. Si gana y juega mal (como casi siempre) voy a esperar que en el próximo partido se gane y se juegue mejor. Eso de decir que si no se juega bien por lo menos hay que ganar, o ganar como sea, a mí no me gusta.
Si se pierde por lo menos hay que intentar jugar bien. Es básico. Porque a partir de una recuperación futbolística se obtienen buenos resultados.
Sin ir más lejos analicemos los dos partidos de la selección en este mundial: en uno se jugó muy mal, sin alternativas de ataque, siendo lento y previsible. La defensa dejó muchas dudas y no hubo respuestas (futbolísticas) del equipo en ningún momento. Además se perdió a pesar de empezar ganando contra una selección que hasta ahora es la sorpresa del mundial pero no deja de ser de segundo o tercer nivel.
En el segundo se jugó de una manera opuesta. Se cambió la disposición táctica, se jugó con otra intensidad y se obtuvo un resultado más que merecido contra una selección de primer nivel.

Me imagino que para todos es mejor y genera más satisfacción ver al segundo Uruguay. El que juega con otra intensidad ofensiva, el que tiene un técnico que puede cambiar y no le tiembla el pulso.
Desde acá se critica la terquedad más allá de los resultados. Cuando los cambios son positivos y se notan diferentes intenciones a pesar de los resultados, vamos a celebrarlo y aplaudir.
Me alegra profundamente que el técnico haya sacado a Lugano (aunque se diga que está lesionado), a Stuani y a otros. Celebro los cambios, demuestran que es un técnico que deja de lado su terquedad y que lo que más importa es la selección.
No me voy a subir al carro de este proceso. Lo voy a criticar siempre, cuando las cosas estén bien y cuando las cosas estén mal. Reconociendo los aciertos y los errores, así me gustaría que fuera siempre.
Porque antes que nada quiero que a Uruguay le vaya bien sin importar quien esté en el banco.

No me gusta Tabárez. Del "proceso" que viene desde el 2006 destaco el buen funcionamiento en 10 partidos o tal vez menos.
Voy a seguir creyendo que tuvo permisos que otros técnicos no tuvieron como perder 4 o 5 partidos al hilo, o entrar al mundial las dos veces por la ventana, tal vez la última la más grave, con un rendimiento bajísimo y terminando 5to entre 9 participantes.
Seguiré creyendo que la renovación es muy poca. Giménez y Stuani son los únicos valores importantes que aparecen para este mundial.
Voy a seguir celebrando la Copa América del 2011, y siempre que me digan que perdimos con Holanda les voy a  decir que fue con un gol en orsai y que Suárez no jugó ese partido porque tuvo que salvar una pelota en la mano que vino después de un cabezazo de un ghanés por una falta inventada.

Voy a darle para adelante a Tabárez si hace las cosas bien, como cuando dejó a Abreu y a Scotti afuera del mundial, y si sigue dejando a Lugano en el banco a pesar de que se recupere de su lesión.
Me va a seguir pareciendo muy mal haber dejado afuera a un jugador porque después de terminar un partido se le haya ido la moto, como pasó con el Cebolla Rodríguez, y tremendamente mal haber dejado afuera al Japo por haber querido ir a jugar la semifinal de la Sudamericana con su equipo después de quedar desafectado de un partido de la selección.

Hoy me toca celebrar el partidazo que se hizo contra Inglaterra, el haber ganado con buen fútbol y espero celebrar el martes la clasificación a octavos. Y si no es así me gustaría que se empatara o perdiera con dignidad, dejando todo futbolísticamente hablando y poniendo toda la actitud, como ha pasado muchas veces.

Los hinchas de Uruguay somos todos. Los que celebran el proceso y lo defienden a muerte, y los que somos hinchas de Uruguay por sobre todas las cosas.

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